Existe...

Miro a la ventana y me pregunto-¿Existe Dios?
Y miro tú foto, contemplo tu belleza, tu sonrisa,
esa mirada hermosa, tierna y delicada a la vez,
admiro tu cuerpo, tu manera de ser,
reflexiono y pienso un momento,
e insisto a mi mismo-¿De verdad existe Dios?;
respiro profundo, suspiro, y siento mis latidos,
me doy cuenta que se fue ese enorme vacío;
que lo he llenado con recuerdos tuyos,
que lo he llenado de ti amor, tu manera de ser,
de tu belleza, de tu grandeza como mujer,
entonces de nuevo respiro profundo,
vuelvo a la foto y te miro fijo,
me percato que alguna vez en mi infancia te pude describir;
que alguna vez soñé contigo,
alguna vez te escribí sin aún haberte conocido,
ore por ti sin saber de tu existencia,
llore por ti y tú aún notoria ausencia,
te anhele, te quise y te ame,
y aún me cuesta mucho entender,
cómo es que a mi vida tan pronto llegaste, y que no te pude ver antes,
aunque estabas y siempre estuviste ahí,
siempre para mí...

Y siento el frío que me recorre la espalda,
cierro la ventana, y vuelve la interrogante-¿Existe Dios?-
y puedo responder con certeza que así es,
porqué no habría manera de poder copiar tan perfecta creación de él,
de lograr un ser tan bello e inteligente a la vez,
¿Existe Dios?, puedo decir que me mostraba incrédulo y por ti de nuevo comencé a creer en él..